El legislador Agustín Coto, fiel defensor de la libertad y los derechos individuales, no dudó en señalar el carácter ideológico de esta propuesta en su cuenta de X: “A pedido del oficialismo kirchnerista, el Concejo Deliberante de Ushuaia tratará el proyecto de ordenanza MÁS COMUNISTA y SOVIÉTICO de su historia. Les dejo el proyecto para que lo vean. Me ahorro los comentarios así lo leen ustedes mismos”.
¿De qué se trata esta controvertida iniciativa? Según el texto del proyecto, se busca imponer una carga tributaria de 150 veces el valor del Impuesto Inmobiliario sobre viviendas desocupadas. Es decir, una vivienda que actualmente paga $15.000 de impuesto bimestral pasaría a abonar un desmesurado $2.250.000 en el mismo período, siempre que se considere deshabitada bajo criterios definidos por el propio municipio.
Un ataque directo al derecho de propiedad
Lejos de ser una medida aislada, este proyecto se enmarca en una narrativa que pone en jaque principios fundamentales como la libertad económica y el derecho de propiedad, pilares esenciales para cualquier sociedad que aspire a prosperar. Bajo la excusa de «fomentar el alquiler permanente» y «resolver la crisis habitacional», se busca, en realidad, penalizar la inversión privada y desalentar la acumulación legítima de bienes.
El texto, además, presume que cualquier propiedad que no sea habitada por más de seis meses será considerada vacante, salvo que el propietario pueda demostrar lo contrario. Este tipo de presunciones revierte la carga de la prueba, estableciendo un escenario de persecución tributaria que carga al ciudadano con una burocracia asfixiante.
Vuoto intentó aprobar el proyecto en la pasada sesión del Concejo Deliberante, pero debido al fuerte rechazo social, Fernando Oyarzún, concejal de FORJA, pidió que el proyecto sea debatido “en profundidad”. Su voto, y el de su compañera de bloque Analía Escalante permitieron que el proyecto no pase a archivo, tal como reclamó la oposición.